«Estos cuentos fueron hechos para quien aún no sabe mucho de nada, que recién está descubriendo las letras, sin embargo, está ávido de aprender y experimentar el mundo».
Así es.
Estos cuentos son para ti…
…Y para tus padres, y para tus hermanos, y para tus amigos, e incluso para tus hijos cuando en el futuro tú ya seas una «persona grande».
Para que en ese entonces ya no le tengas miedo a la oscuridad, ni a nada que te moleste cuando llegue la hora de dormir, como posiblemente te ocurre ahora que eres niñ@.
Y además es dedicado a quien se acomoda muchas noches junto a ti , y seguro te cuida, y te enseña todos esos cuentos que te gustan tanto.
Para recordarle, que al término de cada relato, no olvide acomodarte entre tus ropas de cama y desearte como siempre un buen descanso acompañado de un gran abrazo.
Porque la hora de los cuentos es muy enriquecedor e importante, es el momento en donde se refuerzan las capacidades para enfrentar cada nuevo día.
Por eso dejo aquí; entre medio de estos cuentos, una especie de hechizos dentro de este grupo de historias de todas las latitudes, para ir de viaje al mundo de los sueños tranquilos.
Para que muy pronto le temas «cada vez menos» a la oscuridad.
Hasta que la entiendas como una parte natural de la vida, y como verás en estos cuentos; muchas veces especial … Amigable y necesaria.